Liesel Schmäh

(1901-1983)

Una mujer impresionante: maternal, entusiasta, piadosa y transparente.

Liesel Schmäh nació el 15 de marzo de 1901 y se crio en Friedrichshafen.

Ejerció la docencia como maestra; conoció Schoenstatt en los primeros años del ejercicio de su profesión y a partir de 1924 participó todos los años en los retiros para mujeres docentes dictados por el P. Kentenich.

En el tiempo del Tercer Reich, fue la responsable principal de la naciente comunidad de las señoras de Schoenstatt hasta la constitución del Instituto Nuestra Señora de Schoenstatt en 1946. Fue en atención a ese objetivo que abandonó su profesión y se mudó a Schoenstatt, una acción que en aquella época implicaba sus riesgos. Vivió con una confianza total en el cuidado providente de Dios y respaldó sus convicciones con su propia manera de vivir.

En el trato con los demás era una mujer cordial, maternal, que cuidaba de que los que llegaban a Schoenstatt pudiesen sentirse en casa. A pesar de la prohibición de los nazis, ofreció a las integrantes la naciente comunidad la posibilidad de mantener encuentros grupales. Muchas personas pudieron desahogarse con ella de sus problemas y recibir su consejo y ayuda en las más variadas dificultades.

Una y otra vez entró en conflicto con el régimen nacionalsocialista. En 1936 fue trasladada a la fuerza a otro lugar de trabajo en castigo por su postura contraria al régimen. Fue vigilada por la Gestapo y, en una ocasión, estuvo cerca de que la enviaran a prisión. Por ese motivo tuvo que dejar su lugar de residencia en Schoenstatt. Comenzó así un tiempo de continuas mudanzas, pero ella aprovechó también esa circunstancia para acompañar pastoralmente a sus hermanas de comunidad.

Su preocupación estuvo centrada siempre en las demás, aun cuando por ello se expusiese a grandes peligros. Varias veces apoyó a miembros de la comunidad que habían sido denunciadas a la Gestapo.

También puso todo su empeño en ayudar a los sacerdotes internados en el campo de concentración de Dachau organizando transportes de alimentos y buscando personas que recibiesen en sus casas a los exconvictos tras su liberación.

En 1946 retomó su profesión originaria como docente. Sus alumnos y compañeros la recuerdan con mucho cariño por su modo de ser cálido y encantador, así como también por su profunda unión con Dios.

En Friedrichshafen se la recuerda en la historia de la ciudad como la iniciadora de la «Fiesta del conejo lacustre» (Seehasenfest), un festival local de la ciudad especialmente dedicado a los niños que sigue celebrándose anualmente en la actualidad.

Liesel Schmäh falleció el 3 de junio de 1983.